lunes, 20 de noviembre de 2017

Niñez

Ahora que supuestamente soy (socialmente) un "adulto" y no me siento como tal me doy cuenta de varias cosas. Estoy igual que las señoras que me hablaban cuando era chica dándome consejos de vida que uno nunca atiende completamente si la historia no tiene algo fuera de lo común. Lo mio no tiene nada fuera de lo común, así que bienvenido a mi "vieja culiá" interna ( vieja culiá = señora que reclama por todo y da consejos que nadie le pidió y aún asi nadie va a escuchar).

El otro día pensé en mi mamá, y en la mamá de todos en verdad. Mucha gente desde que salimos del colegio ha tenido hijos, y hace poco mi director de coro también, el cuál, de una u otra forma no está tan lejos de mi madurez mental, y acá viene mi reflexión... Yo le embarré la vida a mi mamá, o sea no directamente pero hice que se obligase a si misma a hacerse la madura y tomar a otro ser humano como responsabilidad, ya no ser cabra chica, los berrinches ahora eran míos no de ella (aunque fui una guagua ejemplar, seguramente porque siempre he sido muy floja, pero ejemplar igual) y su vida pasó a segundo plano. Ya no existía el "me da flojera levantarme, 5 minutitos más" ni muchas cosas más, por lo que me dio pena haber nacido. Supuestamente hay cosas buenas de los hijos, no tengo idea y no me interesa mucho tener una postura con eso, pero pobre de mi mamá, que al fin ahora puede volver a hacer sus locuras, luego de un montón de años gastados en mí y en mi hermano.

Seguramente yo he crecido paulatinamente, pero yo la obligué a crecer de golpe. Para mi es algo complejo porque no es que yo me sienta una mujer inmadura, sino que soy una niña inmadura a tal punto que hago estupideces importantes, como por ejemplo aunque esté sola o en confianza absoluta y tengo que buscar algo que me interesa en google pongo penstaña e incógnito para que no quede rastro, lo mismo con algunas canciones en youtube y un montón de cosas. Pero eso es como problemas de aceptación propio que no se abarcan en el tópico de que los papás son cabros chicos reprimidos, obligados a crecer y a tener que ser buenos en lo que hacen a la primera y/o recriminarselo toda la vida.

jueves, 19 de octubre de 2017

Desprecio

Estoy disconforme ?
Discrepo con la vida, con la muerte, con la creencia.... Discrepo con mi ser
El problema entonces está claro, el problema es ser yo ? O quizás es no ser lo suficientemente yo.
Discrepo conmigo y disgrego mi mente en mil pedazos los cuales valoro como malos, cómo si mi yo perfecto los encontrase disconforme.
Lo que tú necesitas no es ayuda, es vivir.
Hago mil cosas que comienzan con la letra d.... Duermo descanso desprecio y desintegro, pero no logro decidir.
En el contexto social de las relaciones interpersonales solía defenderme, pero ahora ? Ahora he llegado a discrepar ( palabra con d por cierto) con el estar con gente, vivir y conmutar.
"De qué puedo puedo pero no me va a salir"- Diego Lorenzini